Los ojos fertiles

Para volar un poco fuera del cemento porteño, y sentirse un pajarito que ve desde el cielo el horizonte, con mucha agua sobretodo.


"Aire libre

La orilla las manos trémulas
bajaba entre la lluvia
una escala de brumas

Tú surgías desnuda
falso mármol ardiente
tesoro vigilado por criaturas inmensas
que escondían el sol bajo sus alas
para ti
seres que conoceríamos sin verlos

Más allá de los muros de todas nuestras noches
y más allá del horizonte de todos nuestros besos
la risa contagiosa de las hienas
pudo roer antiguos huesos
de aquellos que vivieron de uno en uno

Gozamos en el sol en la lluvia en el mar
en tener sólo un cielo unos ojos y un mar
los nuestros."



Paul Élouard, Les yeux fertiles, 1936

Comentarios

Oruga Viajera dijo…
Una vez, o varias, un chico me dijo que Elouard es dios. Así que aunque suene un poco fuerte, se puede decir que conocí a dios finalmente... jajaj

Gracias Ang por prestarme el libro =P
Anónimo dijo…
de nada!!! vos siempre encontras cosas interesantes en las bibliotecas ajenas. sos una profanadora de bibliotecas ajenas. mi ratita de biblioteca! ahahaha. hablando de eso no le avise a mi vieja q le chorizeaste su librillo!
QSUM dijo…
¿Lo que mata es el calor? pense que era la humedad... Tu blog como que se bronceo, muto del amarillito al ocrecito.
Nice.

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